jueves, 30 de mayo de 2013

Lo que espero de mí

Hace tiempo que ando cansado en este mundillo de internet. Hace tiempo que la pasión de escribir no me viene como antes, y es por eso que hace tiempo que no soy capaz de mantener un ritmo de subida. Supongo que he estado alargando esta marcha a fin de esperar al final de temporada de B2E y tener un verano para descansar, pero no me veo ni capaz de volver a la carga en septiembre.

Quizá sólo necesite dejar este mundo por un tiempo, o quizá lo que necesite sea dejar B2E y empezar de nuevo, aunque por supuesto no será en esta temporada. He estado pensando esto detenidamente durante toda la semana, consultando opiniones de mis amigos más cercanos, y he llegado a la concusión de que B2E me ha dado todo lo que podía darme, y es hora de embarcarme en nuevos proyectos y en defitiva, trabajar solo. 

No se si volveré a este blog, o si quiera si volveré a blogger. No estoy contento con lo que hago; escribir se ha convertido en una obligación y esto es algo que siempre he hecho para entretenerme a mí. Puede sonar egoísta, pero es así. Y si esto ha dejado de entrenerme es que algo va mal y es hora de tomarse un descanso. Puede que a final de temporada decida o volver o puede que no lo haga nunca más. Eso ni siquiera yo lo sé. 

Aun así, sólo me queda dar las gracias por este año y medio donde hemos obtenido casi las 5000 visitas, y estoy realmente feliz del día en que decidimos crear este blog. Ahora es el momento de despedirse.
Espero volver a leeros muy pronto!

Sígueme en twitter: https://twitter.com/FranMartin93

lunes, 13 de mayo de 2013

Érase un momento

He abierto los ojos, y lo único que veo a mi alrededor es una habitación fría y oscura, iluminada sólo por una pequeña luz en el techo; sin embargo, mi sensación no es fría y me siento bien, como si me encontrara en mi propio hogar. Incrédulo de mi sentir, empiezo a dar vueltas intentando buscar una explicación a lo que está pasando, y cuando parece que empieza mi desesperación a alimentarse de mí, se abre la puerta.

Apareces tú, y entonces ya entiendo la razón de sentirme bien en ese lugar. Ese lugar frío se convierte de inmediato en la habitación de mis sueños, y las paredes frías se revisten con un blanco que hace que esa luz del techo, rápidamente se convierta en un sol que ilumina toda la habitación creando el lugar más agradable en el que jamás he estado. 

He encontrado un sitio donde estoy aliviado. Las negras sensaciones de mi corazón han desaparecido, y el dolor que me destrozaba el alma de repente ha sido vencido por un sol en el techo, y todo ha sucedido gracias a ti. Pero me acerco a ti y te esfumas, y de repente mi mente recuerda toda la realidad. Te fuiste hace tiempo, y no pude despedirme de ti.

De repente, he despertado. Me encuentro en mi habitación fría y oscura volviendo a la realidad, pero hay algo nuevo. Las punzadas en el alma han desaparecido y he encontrado dentro de mí un remanso de paz. Ese momento fue nuestra despedida, acudiste a rescatarme en mis sueños y conseguiste que me liberara de esta carga. Ahora puedo empezar de nuevo, y volver a vivir sin atarme al pasado. Esta es mi historia, y quiero que tenga un final feliz.

Sígueme en twitter: https://twitter.com/FranMartin93

lunes, 6 de mayo de 2013

Frente a Frente

Ahí estais los dos, manteniendo fija la mirada el uno en el otro, totalmente evadidos de lo que sucede a vuestro alrededor, sin mirar ni pensar en nadie, manteniendo solamente la mirada. 
Teneis muchas cosas que deciros, pero no lo haceis, porque al fin y al cabo no teneis valor y sólo conservais el miedo a haceros daño mutuamente, a destrozaros el alma y a amargar durante varios dias vuestra existencia.

Pasan los minutos y ahí seguís, totalmente quietos, esperando que uno inicie la conversación y de fin a este desconcierto. Ambos habéis cedido el uno por el otro demasiadas veces, y estáis cansados de mantener algo inexistente, algo que ha acabado por destrozar todo lo que había a vuestro alrededor. 
Lo habéis perdido todo, y ya no os queda nada, ni tan siquiera os tenéis a vosotros mismos para ofrecer ayuda y consuelo. Sólo queda presenciar ese final que una parte de vosotros desea ver desde hace tiempo, esa parte que desea que se elimine ese peso de aguantaros día tras día, y que siente que si acabáis con esta farsa, ambos seréis felices.

Pero todos saben que eso no es así, que esto no es como un chicle que te cansas de él y lo arrojas a la papelera. Os duele teneros en frente, y no poder articular ni una sóla palabra ni para lanzaros un improperio, ya que os falta valentía para enfrentaros.
Así pasa el tiempo hasta que os cansáis de miraros y entonces os dais la vuelta y seguís vuestro camino. Os habéis tenido frente a frente pero no había nada que decir, ya que aunque nadie se de cuenta la mirada ha sido vuestro medio de comunicación, las palabras han sobrado y cuando decidistéis marchar, todo estaba dicho.

Ya sólo queda un amplio desierto entre los dos, y una brecha que ya es imposible de curar.

Sígueme en: