Manual de Instrucciones de Como Comprender a Una Mujer. Capítulo
dos: Los estados de la mujer. Como reconocerlos y afrontarlos.
La
mujer, ese ser tan especial, tan mágico y misterioso que a veces
parece bipolar y con un trastorno grave de la personalidad....
Los
estado de la mujer pueden llegar a causar mal entendidos en la
pareja. Pueden incluso acabar con la relación. Por eso he decido
daros unas pautas o instrucciones para que sepáis como manejar
nuestro humor.
Entramos
en situación.
“Cariño,
te quiero mucho, hoy estoy muy sensible” (Tono suave, sensible y
delicado) (¡Ojo! Con ese “estoy sensible”) Y tú que más o
menos sabes ya por donde va el asunto le respondes con una vocecita
dulce “Yo también te quiero” aquí es cuando el hombre se confía
y piensa que tiene la situación controlada pero NO. Nunca te confíes
porque somos impredecibles.
A
esto que ella te dice: “Pero ¿cuanto me quieres?(con un tonito
raro que ni yo sé describir)” CUIDADO, PELIGRO DE EXPLOSION.
Tú,
que te sientes confiado, que crees que dominas la situación le
dices: “Pues mucho” “Pues mucho, ¿qué respuesta es esa?
Mucho, ¿cuanto es mucho?¿Es que no me quieres? Yo ya lo sabía, si
te notaba raro, distante, aaaaaaiiiiiih que sola estoy”
El
hombre mira esta gran situación pensado que qué diantres hizo mal.
Dos preguntas, dos respuestas que contesto correctamente, ¿qué
paso? La mujer y sus raros estados de animo.
Yo
que soy mujer no llego a comprender mis cambios de humor, ni siquiera
los domino, así que simplemente os diré cuando debéis tener
cuidado y como debéis dominar la situación.
Época
de exámenes, ella se siente estresada, tiene trabajos que se
reproducen y nunca acaban, tiene temario que ni sabía que existía
pero que se tiene que estudiar. Así que saca un poco de tiempo para
estar con
su
novio/amigo/esposo.
Se
supone que tú tienes que darte cuanta de que está estresada, si no
te das cuenta o eres ciego o eres tonto. Ante ésta situación el
hombre debe adoptar una actitud delicada y suave. A poder ser que la
invite a ver una película, que no haya mucho contacto verbal (este
es un gran consejo, si hay tensión y sabes que explotara con
cualquier cosa: PELICULA)
El
hombre sera conciliador e intentará que ella saque su frustración
hablando o …. “cabalgando”. Hay que quemar el estrés antes de
que este te queme a ti. Intenta estar atento y pegajoso, bueno,
tampoco muy pegajoso no.
-Esa
época del mes en la que la mujer tiene visita. La Señora de Rojo la
acompañara durante 4, 5 e incluso una semana.
La
mujer está hiper sensible, cualquier comentario e incluso mirada
pueden acabar en discusión, a la que no sabrás como llegaste.
“Estoy
mal, quiero chocolate” y tú como gran novio/amigo/marido que eres
le das chocolate o le dices que coma chocolate. Después de esto
pueden pasar dos cosas: O te pide más o le entra el bajón y te
suelta un: “Me estoy poniendo gorda, redonda, mírame, pero ¿por
qué me animas a comer? Aaaai, que sola me voy a quedar. Sola y
gorda”
Lo
sé, todo esto es una contrariedad. Tú solo limítate a mimarla y
decirle lo guapa y preciosa que está siempre. Y si ya le llevas
chocolate o chuches acompañados de un “Hola, princesa, te he
traído algo dulce” TRIUNFAS.
(El
tema de la Señora de Rojo merece un capítulo entero).
-Pelea
con algún familiar o amiga/o. Su humor parece una montaña rusa.
“Qué
mal me cae, es que la odio, si yo no le he hecho nada” y tú
pecando otra vez de confiado sueltas por tu boquita “La verdad es
que es un poco falsa”. “Pero no malmetas, que es mi mejor amiga,
que malo eres, ya sabía yo que te caía mal” De repente el enfado
que tenia con esa persona paso a tenerlo contigo.
Intenta
no posicionarte y sobretodo tienes que parecer conciliador (aunque
esa persona te caiga muuuy mal).
-Este
punto suele pasar con mucha frecuencia. “ ¿Qué te parece este
vestido? ¿Me queda bien?” Tú que la ves preciosa con todo le
dices desde la sinceridad de tu corazón “Te queda muy bien” Ella
se mira como unas doscientas veces más en el espejo y te dice “¿Qué
me queda bien? Pero si parezco un botijo, pero si voy fatal, aaaai
que gorda estoy”
Tú
limítate (otra vez) a decirle que es perfecta y bella durante las
siguientes dos horas, ella no se lo creara pero no se podrá cabrear
contigo.
Esta
situación ni la manejo yo...
Quiero
que sepáis que las mujeres somos seres con la sensibilidad a flor de
piel, unas más que otras. Yo personalmente, me considero la persona
más sensible que conozco. A veces ni yo logró entender que me pasa
y mis cambios de humor drásticos. Cuando alguna situación te
sobrepase y no sepas que hacer limítate a ser dulce y cariñoso,
casi siempre necesitamos un abrazo o un hombro donde desahogarnos.
Somos
taaaaan complicadas.
Esto
es todo por hoy, recordar que tendréis otro capítulo en pocas
semanas.